Adalberto Cevasco (1946-2025)

Imagen Portada

Cuando el lunes 3 llegó desde España -país donde hace tiempo residía- la triste noticia de su partida, no faltó quien susurrara: “Paren de irse para el otro lado, que nos quedamos sin capos”. Eso era “Adal”, un capo… dueño del sonido profundo del bajo durante décadas, en la Argentina.
Los más grandes lo convocaron para enriquecer sus formaciones. Él también armó grupos, creó una música impar y fue un sesionista de lujo. Luego de arrancar con Black Combo, el grupo de Sandro, siguió un camino de inmersión en el jazz y otros ritmos, sin olvidar la música popular. También fue imprescindible en el grupo Anacrusa.
Llevó su arte a las bandas de Rodolfo Alchourron y Leandro “Gato” Barbieri. Acompañó a este famoso saxofonista en su Proyecto Latinoamericano, con el que se presentaron en importantes festivales internacionales, además de grabar los álbumes Latinoamérica - Capítulo 1, en Buenos Aires, y Capítulo 2, en Los Angeles.
 
Tuvo la dicha de ser llamado por el maestro Astor Piazzolla para participar de su Octeto Electrónico, que se lució en el Carnegie Hall de Nueva York y en los más prestigiosos teatros de Argentina, Brasil y Uruguay. También fue parte de la big band que, en 1981, acompañó a Frank Sinatra en el Luna Park, bajo la dirección del maestro Don Costa.
 
Además de participar como bajista, Cevasco colaboró como arreglador del quinteto del trompetista argentino Roberto “Fats” Fernández. De esa unión quedaron dos discos: La música y la vida y Cuore, donde colaboraron músicos de la talla de Winton Marsalis, Jorge Dalto, Bob Mintzer, Baby López Fürst y Michael Urbaniak, entre otros.
 
Más adelante, con los destacados maestros Leopoldo Federico y Horacio Malvicino, grabó Made in Buenos Aires. También acompañó al reconocido compositor y director Lalo Schifrin, junto a la Orquesta Sinfónica Nacional.
 
Lamentamos tener que despedir a este músico talentoso, que nos seguirá regalando sus acordes en Pájaros Eléctricos, su trabajo de sello personalísimo, entre otras obras maravillosas.
Nuestras condolencias para su mujer, la cantante Patricia Clark, y toda su familia.